
Vivían en el país de los Hiperbóreos. Tenían unas garras muy largas y su pie era tan grande que algunos habitantes lo usaban para hacer copas.
Muchos cazadores intentaban ir a coger los nidos de oro, pero los grifos, con su gran instinto, sabían mantener alejados a los ladrones y saqueadores de aquel metal tan precioso.
No hay comentarios :
Publicar un comentario