En la Tierra, en primavera no hace ni frío ni calor, las flores florecen, huele bien, tiene unos preciosos colores... en primavera todo parece mejor al ver los pajaritos cantar y las flores de tantos colores.
Pero una cosa que me gusta mucho de la primavera es que, a mi parecer, todo el mundo se lleva mejor; no sé si son cosas mías, pero es como si nos afectara y actuamos más serenos, con más calma, nos enfadamos menos...
Ahora vamos a hablar de un planeta muy lejano llamado Preciosilandia. En este planeta la primavera es diferente que en la Tierra, a las flores les salen piedras preciosas en vez de pétalos: a los azahares les salen rubíes, a las rosas les salen diamantes, a las orquídeas les salen gemas, a los tulipanes les salen esmeraldas de distintos colores... Pero lo más raro es que no huelen, tienen poderes curativos; os voy
a poner un ejemplo: si te comes un tulipán te vuelves invisible, si te comes el azahar te vuelves pequeño, si te comes la orquídea te vuelves inteligente, si comes una rosa te vuelves fuerte...
También hay una cosa más rara todavía: allí no vive nadie. Imagina poder viajar en esa estación del año a ese planeta y poder hacer lo que tú quisieras sin que nadie te dijera nada.
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